¿Quieres soñar conmigo?
Ven, acompáñame. A veces sólo tenemos que quedarnos dormidos.
Y así, cuando por fin hayas aceptado el destino inevitable, me acompañarás y soñaremos juntos.
Soñaremos con la pasión propia de aquellos que con tan sólo cruzar una mirada saben a lo que están predestinados.
Ahora, por primera vez, se dan las condiciones.
Pero el destino siempre es incierto, nunca se puede asegurar nada en el plano onírico... Todo parece seguro en inseguro a la vez...
...Sólo espero soñar que soñamos juntos...
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