Soñando
La otra noche soñé contigo. Espero que puedas perdonarme, pero soñé que éramos felices. No era mi intención, te lo prometo, pero no pude evitarlo. El miedo no nos atenazaba la garganta, y respirábamos el mismo aire que todo el mundo, no este maldito fuego líquido. Soñé que despertaba y al girarme hacia tu lado de la cama no sentía la punzada de saber que no estarías allí. Perdóname, pero soñé que jamás nos habíamos conocido.
Oh... me siento especialmente sensibilizado con tu aporte... Muchas gracias.
ResponderEliminarme gusta :)
ResponderEliminarMe alegro que os haya gustado
ResponderEliminar